Sarah Poniatowski, conocida por su estilo distintivo y atemporal, que combina la elegancia parisina con influencias eclécticas, era una elección obvia para Mobalpa. Su trabajo, caracterizado por el hábil uso de colores vivos, estampados gráficos y materiales refinados, encaja perfectamente con la idea que Mobalpa tiene del diseño de interiores. Así pues, los equipos de Mobalpa trabajaron con Sarah Poniatowski para rehabilitar esta granja de montaña, a su imagen, por supuesto, pero también a la de los propietarios.
El objetivo era encontrar el equilibrio perfecto proponiendo soluciones adaptadas a los usos cotidianos de los residentes. ¿El resultado? Un diseño que contrasta con el lugar, atípico y auténtico, a la vez que lo respeta. Mezcla de experiencia probada y diseño contemporáneo, este proyecto a 4 manos refleja el compromiso permanente de la marca europea con la excelencia.